El Cubo de Rubik

El cubo de Rubik nunca se ha caracterizado por ser solamente un juego, un rompecabezas, un pasarratos, una comedura de coco, un pasatiempo o una distracción. El cubo es algo mucho más profundo, es... tu vida representada en seis colores.
Tu eres todo el cubo y conforme vas viviendo vas completando una cara del cubo. Cada color es un aspecto distinto de la vida.

En primer lugar está el color azul, es con uno de los primeros con el que empezamos a jugar y al mismo tiempo es uno de los que aguantan sin completarse hasta el final. El azul representa a los amigos, hay que tenerlo vigilado hasta el final porque es de los que cuesta más trabajo conservar, se puede compaginar y hacer a la vez que el verde o incluso que el rojo, pero con este último es más dificil.

El color blanco está siempre presente y lo intentamos mover de un lado a otro para tenerlo como medio listo y tener de su ayuda para apoyarno en los demás. El blanco es la familia, que nos echa una mano para completar el resto de colores.

El siguiente es el verde, un color que nos puede obsesionar, o puede estar ahí sin hacerle ni caso. Eso sí, casi nunca se deja para el final. Como he dicho antes, se puede compaginar con el azul, y si nos ponemos cabezotas con el amarillo, con el rojo,... El verde corresponde al tiempo libre al que le podemos dedicar mas o menos tiempo, según lo ocupado que estemos con el resto de colores. Es aconsejable siempre echarle un vistazo, porque podemos desperdigarlo por todos los demás colores y al final no sabemos como organizarlo. A este se le dan muchas vueltas pero sale, os aseguro que sale.

Ahora está el naranja, un color puñetero, que te puede distrar del verde, del azul, del rojo... de todos vamos. Este color hay que dedicarle el mínimo tiempo posible, pero hay que dedicarle un tiempo, sino el cubo no sale. El naranja es el trabajo o nuestras obligaciones, nuestro cargo. Es desagradable completar este color, pero hay que hacerlo para completar del todo el cubo.

El amarillo. Desde que Molière muriera vestido con este color se ha destacado por ser un color gafe, sobre todo en el teatro, pero también en la vida real. El amarillo es un color que lo mejor es dejarlo para el final, pero si lo dejas para el final... algún día tendrás que completarlo. Este color se relaciona con la muerte, las desgracias, las movidas y todo lo desagradeble que nos puede pasar en la vida. Cuidado con el amarillo.

Por último está, el que para muchos es el más difícil de conseguir. El rojo. Es un lado que hay que empezar a buscar poco a poco desde que el cubo cae en nuestras manos. Tarde o temprano se consigue, aunque también hay veces que no. El rojo muchos lo quieren conseguir el primero pore es el más difícil de todos, el más peleón. Lo buscamos una vez y otra y otra, pero nada. Con el rojo hay que ir con paciencia, porque es el típico lado que se completa solo sin que te des cuenta.
Corresponde al amor.

A veces nos complicamos mucho la vida, empezamos a mover colores, lados, cuadros de un lado a otro sin sentido. Vale que a veces sale, pero normalmente no. Hay que ir buscándo cada color poco a poco, sin prisa pero sin pausa (como decía mi padre).

Suerte con vuestro cubo, el mio ahora mismo está hecho un lio, y es cierto que quiero acabar unos lados antes que otros, pero yo mismo debo seguir mi consejo.

Suerte en vuestra aventura...